La inconsistencia ha regresado a Manchester United. Después de haber arrancado la temporada con cuatro victorias, los Red Devils hilan tres derrotas de manera consecutiva; septiembre ha sido un dolor de cabeza, el rendimiento general del equipo ha venido a menos, pero hay una zona en específico que ha dejado de funcionar: el mediocampo.
Esta posición les exige a sus jugadores una dosis especial de liderazgo, constancia, equilibro e inteligencia; no basta con saber pasar el balón, hace falta medir los tiempos, leer las jugadas y tomar decisiones al instante.
En siete partidos oficiales, José Mourinho ha experimentado con cinco hombres, cuatro parejas y dos esquemas diferentes en el mediocampo, pero no ha encontrado soluciones.
![]() |
Foto editada por: @PamRod24 |
La principal apuesta del técnico ha sido la dupla conformada por Marouane Fellaini y Paul Pogba. Se trata de dos jugadores de corte ofensivo que no se complementan, pues los dos prefieren y necesitan jugar dentro del campo rival, ninguno de ellos crea puentes entre la defensa y el ataque, y esto se ha evidenciado cuando durante los partidos queda la duda de quién es el encargado de frenar al rival o iniciar las jugadas.
Mourinho optó por solucionar el problema menos grave y sumó a Ander Herrera como una de sus opciones para el mediocampo. El español es un jugador que le añade apertura a las jugadas y que puede cambiar la dinámica de los partidos, pero también necesita jugar dentro del área rival.
Foto: Getty Images Sport/AMA/Catherine Ivill |
El técnico de los Red Devils ha priorizado el aporte ofensivo de sus jugadores y ha descuidado la parte del equilibrio, que es vital en la zona media. El equipo presiona la salida del rival, se impone en los duelos aéreos y suma mucha gente en ataque, pero suele quedar mal parado en defensa porque los relevos para cubrir a laterales desacomodan a los centrales. Además de los espacios, también preocupa que el equipo no tenga un antídoto para combatir la superioridad del rival cuando este se hace del balón y toma la iniciativa del partido.
Al United le hace falta un mediocampista fijo, un pivote o un cinco, un jugador que anticipe los movimientos del rival y recupere balones, un elemento que le dé pausas al partido y claridad a los ataques del equipo, que abra la cancha con pases largos, pero que también apoye a la defensa cuando los laterales se incorporan al ataque.
Los minutos de Michael Carrick y Morgan Schneiderlin han sido contados y hoy el equipo los pide con urgencia.
![]() |
Foto editada por: @PamRod24 |
La temporada inició con buenos resultados y buenas actuaciones, pero todo se descompuso cuando el rival tomó la iniciativa y evidenció las carencia de la zona media del equipo. Lo positivo de la situación es que la temporada es joven y que los problemas del equipo tienen solución. Aún no es momento de entrar en pánico y desestimar el trabajo del técnico, la afición debe tomar este bache con calma, pero el cuerpo técnico no debe darse cuenta que la paciencia es poca, que el margen de error es mínimo y que un error como este puede tener el efecto de una bola de nieve y terminar en una catástrofe.
0 comentarios :
Publicar un comentario
Recuerda seguirnos en twitter @RinconDelUnited