Michael Keane y su turbulento paso por el Manchester United

Hoy en día todo el mundo está volteando a ver a Michael Keane, un defensa de 24 años que se graduó de la Academia del Manchester United y que a base de trabajo duro se ha consolidado en la Premier League. Keane atraviesa por el mejor momento de su carrera, juega como titular todas las semanas y forma parte de la selección nacional de Inglaterra. Recientemente terminó tercero en la votación al Mejor Jugador Joven de la PFA y no hay duda de que a partir del próximo verano lo veremos con un equipo grande.

De acuerdo con la prensa inglesa, Manchester United es uno de los equipos interesados en el fichaje de Keane. Parece que la historia se repite, los Red Devils están a punto de repatriar a un jugador al que dejaron ir sin darle una oportunidad real para demostrar su valía.

En medio de todo el revuelo que hay por el defensa, el diario The Times le dedicó un reportaje especial y lo traemos a colación porque en él, Michael Keane habló sobre los retos que afrontó y superó para hacerse un lugar en la Academia del United y tener la oportunidad de llegar al primer equipo.

Imagen vía: Wales Online

La historia de Michael con los Red Devils estuvo llena de altibajos y complicaciones desde el comienzo. Cuando Michael Keane llegó al equipo nadie le prestó atención, formaba parte de la Academia del club, pero cuando oían el apellido Keane, todos pensaban en su hermano gemelo Will. Al voltear al pasado, Michael reconoce que esa reacción era natural porque, de los dos, Will era el que tenía un talento natural: "Will siempre fue el especial, el que estaba destinado a triunfar en el United viniendo de la Academia. Yo no era naturalmente bueno o talentoso, mi objetivo era trabajar y luchar hasta cumplir mi sueño", compartió el defensa.

Las diferencias entre los dos hermanos salieron a relucir desde temprana edad, cuando Will estaba con la sub-18 con 14 años, Michael luchaba por permanecer en el programa pues era basta más bajo de estatura que sus compañeros en la sub-16 y mientras en la temporada 2009/10, Will era reconocido como el Mejor Jugador Sub-18, Michael veía como el United recortaba su beca y le decía entrelíneas que no creían en él: "En varias ocasiones me dijeron que ni siquiera estaba al nivel de los jugadores que eran más jóvenes que yo, decían que nunca iba a ser profesional, pero nunca me deje afectar por esos comentarios".

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Cuando el panorama no pintaba nada bien, Paul McGuinness creyó en Michael y le ofreció otra oportunidad con el United. El ex-director de la Academia de los Red Devils recuerda lo que lo llevó a apostar por Michael: "En comparación con su hermano él era el patito feo, pero había algo especial en Michael, mostraba mucha determinación y aprendía rápido".

McGuinness fue quien rescató la carrera de Michael, pero no lo hizo por arte de magia, el técnico estableció un régimen de entrenamiento muy estricto para que Keane dominara los aspectos básicos del juego. La rutina de Keane era una pesadilla, de 9 am a 4 pm, el muchacho iba a la escuela, de 5 pm a 6 pm entrenaba en Carrigton y cuando terminaba, regresaba a su casa para seguir estudiando pues la parte académica es muy importante en el programa de formación del United. Los horarios de Michael eran una locura, pero él contaba con el apoyo de sus padres y de McGuinness y estaba decidido a luchar por su sueño de ser futbolista. En ese momento el defensa priorizó su carrera, dejó la escuela, se dedicó a entrenar y a estudiar por su cuenta.

Esa decisión le pagó dividendos a Michael, su carrera despegó y llegó al equipo sub-18 que en 2011 ganó la FA Youth Cup. A la par que triunfaba en el fútbol obtuvo sus certificados de bachillerato en química, física y biología.

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De esa época de su vida, Keane recuerda una anécdota muy especial que no tiene que ver con el fútbol, pero que involucra a Sir Alex Ferguson: "Mis compañeros recibían 115 libras por semana, pero yo no tenía la beca completa y tan solo recibía un apoyo de 40 libras para mis estudios. Un día Sir Alex habló conmigo y me dijo 'sé que dejaste el colegio para luchar por esto, ¿cómo llevas tus estudios?', le dije que tenía tutores y después me llevó a su oficina. Me preguntó cuánto gastaba en tutores por semana, le respondí y él me devolvió lo que había pagado y cubrió el resto. Cosas como esas lo hacía ser más que un técnico".

A partir de 2011 las cosas cambiaron, ante una lesión de ligamentos cruzados de Will, Michael pasó a ser el gemelo estrella. En las temporadas siguientes el United lo cedió al Leicester, Derby County y al Blackburn, regresó a Old Trafford y tuvo una gran actuación en la gira de pre-temporada del verano de 2014.

Todo parecía ir viento en popa para Michael Keane, con Louis van Gaal el defensa llegó y debutó con el primer equipo del Manchester United, pero el momento y las circunstancias que rodearon el evento no fueron las mejores. El único partido profesional de Keane con los Red Devils fue la derrota de 4-0 que el United sufrió contra el MK Dons en la Copa de la Liga en agosto de 2014. Ese juego fue una pesadilla y pasará a la historia como una de las peores actuaciones del club. De los 18 jugadores que participaron en ese partido, en 2017 tan solo sobreviven cuatro: De Gea, Pereira, Januzaj y Wilson.

Imagen vía: The Sun

Keane fue uno de los jugadores a los que Van Gaal les retiró su confianza y en el último día del mercado de traspasos de esa temporada, el técnico holandés le dijo a Michael que tenía que salir del club. El jugador estaba determinado a irse, pero a préstamo, para tener la oportunidad de regresar y demostrar que tenía todo lo necesario para triunfar en el club.

Al defensa se le presentaron dos ofertas, una cesión con el Blackburn y una venta definitiva al Burnley: "En ese momento intenté forzar una cesión, pensaba que podía salir y regresar para demostrar que podía jugar con el United", recuerda Keane. "Pero llegó Sean Dyche, se reunió conmigo y con mi familia, él cambió mi actitud y fichar con el Burnley ha sido lo mejor que me ha pasado".

Bajo la dirección de Dyche, Michael Keane aprendió a defender, aprendió a posicionarse dentro del área, a despejar y a cabecear, su juego cambió por completo y alcanzó un nuevo nivel. Su nuevo técnico le dio la oportunidad de jugar y aprender semana a semana sin el temor de ser castigado por sus errores: "A Dyche no le molesta que cometa errores, con 24 años aún no soy perfecto, sigo aprendiendo y a veces me equivoco. Él siempre habla conmigo, me dice que es lo que tengo que mejorar, pero nunca lo hace frente a los demás, lo hace en privado de manera constructiva, muy diferente al estilo de Van Gaal".

Keane voltea hacía atrás y lo hace sin resentimientos, dice que no se ve a sí mismo como una versión mejorada del jugador que dejo al United, sino como un jugador completamente diferente: "No me veo a mi mismo como una versión mejorada del jugador que era cuando salí del United, me veo como un jugador diferente. Soy más agresivo, más fuerte y rápido, diría que soy un defensa rudo, pero tengo una buena técnica y sé salir con el balón".

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Ese es el tipo de jugadores y defensas que despiertan el interés de los mejores equipos, por su presente es inevitable hablar sobre la posibilidad de un traspaso a un equipo más competitivo: "En mi cabeza no tengo la idea de demostrarle al United que cometieron un error, tan solo quiero demostrar que estoy haciendo las cosas bien. Siempre he tenido el deseo de regresar a un club top, con esto no le estoy faltando el respeto al Burnley, ellos han sido muy importantes en mi carrera, pero quiero luchar por más. Tengo esa idea y nada me va a detener".

El deseo y la ambición de llegar a un club top están ahí, pero de momento Michael prefiere concentrarse en su presente con el Burnley y asegura que por lo pronto no tomará ninguna decisión sobre su futuro: "No creo que vaya a tomar una decisión en estos momentos, esperaré hasta el final de la temporada. Todavía tengo muchas cosas por cumplir con el Burnley y no quiero que nada me distraiga".

Aunque Michael Keane no quiera pensar o hablar sobre su futuro, los rumores de la prensa son insistentes y todos apuntan a que Liverpool, Everton, Tottenham, Chelsea y Manchester United están interesados en su fichaje. La carta del defensa está valuada en 30 millones de dólares y sin importar cuál sea su próximo destino, el United recibirá el 25% de lo que el club de Turf Moor reciba en caso de que vendan al defensa y esto es a razón de una cláusula que los mancunians incluyeron en el contrato que llevó a Keane al Burnley en 2014.

La historia de Michael Keane es diferente a la que vivimos con Paul Pogba, Michael trabajó y luchó por cumplir su sueño de ser fútbolista, el United le dijo que no en dos ocaciones, pero tal vez la tercera sea la vencida. Keane está hecho un jugadorazo, sería una gran incorporación para el equipo y él ha dicho que de corazón siempre será Red Devil. Ya veremos que pasa en el verano.